7 de agosto de 2008

DESIERTOS PERSONALES



Un amigo me acaba de contestar al video del árbol (hace 2 posts) alegando que él se veía reflejado en esa soledad del desierto. No he podido evitar ponerme un poco "jonda", como dice él... aquí está mi respuesta:


Yo también lo he sentido! De hecho todavía a veces me pasa, cuando miro alrededor y las pocas personas que me conocen bien no están cerca, y entonces el resto del mundo me mira estupefacto porque soy poco ortodoxa en esto y aquello, para después alejarse despacio mirándome con una mezcla de curiosidad e incertidumbre, y me dejan ahí, aislada y llena de preguntas. Pero yo no me veo tan marciana, así que hago eso, mover un poco las hojas al viento y dejar que el solecito me dé en la cara.

Pero eso es ahora, que me siento radiante y por eso en plan negativo sólo me ocurren menudencias. En el pasado no siempre fue así. Un día te contaré una historia, que por cierto me hiciste venir a la cabeza el otro día. Para mí no hay peor soledad que la de estar acompañado y seguir sintiéndote solo. Pero si eso sucede, generalmente sigues tirando de la cuerda, para ver si la otra persona se da cuenta y hace algo, para ver si despierta y te comprende, para intentar que todo vuelva a ser como al principio, para reencontrar a aquel ser de quien te enamoraste, para tratar de recuperar esa sensación placentera y despreocupada de cuando el sofá no se hacía tan enorme porque un abrazo cálido te estaba sujetando.

Y como después de años de perseverancia eso no llega y ese mismo sofá cada vez parece más largo y más gélido, entonces no queda otro remedio que mirar hacia dentro y contemplarse a uno mismo, y aceptar que no tenemos modo de controlar cómo respiran los otros. Sólo tenemos la posibilidad de elegir qué queremos hacer con nuestra vida en cada momento. Y cuando tomamos consciencia de que las opciones están en nuestras manos, eso nos llena de un poder inabarcable y pleno y finalmente reconquistamos nuestra serenidad.

Viene a ser como lo del árbol: al buscar las raíces más profundas se encuentra un agua mucho más pura, que es la esencia que la tierra te regala cada día.

Pero eso es sólo cómo lo veo yo… como me dijo mi coach la semana pasada: todos somos un misterio desplegándose!

En fin, que todavía no me he tomado el café y no sé ni lo que digo ;-) Un beso y buen jueves, E
fuente fotografía: GOOGLE

3 comentarios:

  1. elisa, me encanta cuando escribes tú, como ahora, me gusta mucho, me encantaría que tus posts siempre fueran como este o el otro que te leí del aeropuerto, me da pena si encuentro algo que no sea del todo tuyo, me gusta mucho el tono que le das a lo que escribes

    un beso

    ResponderEliminar
  2. Me alegra un montón que estés escribiendo. Y que lo hagas cada vez mejor, y cada vez con más frecuencia. Un beso grande, piernas largas.

    ResponderEliminar
  3. Así da gusto, qué ánimos, gracias gracias gracias.

    Seguiré dando el callo para aproximarme a vuestra altura.

    Besos prevacacionales ;-)

    ResponderEliminar

(Deja tu loncha):